Historia de la madera

Las ramas de los árboles fueron los elementos más antiguos manejados y manipulados por el ser humano para su supervivencia. Por su abundancia, accesibilidad y fácil manejo, la madera ha sido un elemento clave en nuestra evolución y se ha identificado, junto con la piedra, como uno de los materiales esenciales. De hecho, su etimología deriva del vocablo latino “materia”. La madera se encuentra en la naturaleza en forma de cuerpo leñoso en árboles y arbustos, con una estructura polimérica de fibra de celulosa en forma de tubo, acompañada de otras sustancias también aprovechables, como las resinas, los aceites, los taninos o diversos azúcares.

La producción de herramientas, útiles y armas marcó el comienzo de su utilidad para los primeros homínidos, pero pronto descubrimos su capacidad de combustión y fuimos capaces de aplicar este material para controlar y producir el fuego. El uso de la madera como combustible marcó una etapa clave en nuestros orígenes, ya que mediante el fuego se superó el ritmo natural marcado por la luz solar, aumentando las horas de convivencia. La madera ejerció de algún modo como material determinante para la cohesión social. El fuego incrementó las relaciones entre los individuos, mejoró los sistemas de protección frente a los grandes depredadores y transformó nuestros sistemas de alimentación y conservación de alimentos.

Pero más allá de la Prehistoria, se han atestiguado igualmente evidencias de la utilización que todas las sociedades han hecho de la madera. Su uso ha sido una constante en el desarrollo de técnicas y aplicaciones a lo largo de la historia. Las primeras ruedas macizas se fabricaron con madera; los fenicios ya utilizaban este material en sus embarcaciones; las murallas y las grandes construcciones medievales se levantaron basándose en soportes de madera y ha sido la base de la construcción de todo tipo de edificios durante siglos. Lo cierto es que se ha utilizado como material esencial para la fabricación de instrumentos, armas, empalizadas, construcciones, viviendas, carros, embarcaciones. envases, mobiliario, objetos decorativos, obras de arte o instrumentos musicales. Igualmente, sus resinas han sido el componente esencial de adhesivos y aditivos para la fabricación de pegamentos, pigmentos, disolventes, fármacos, perfumes, alquitrán y pez. Y más aún, a partir de su uso para estos compuestos, la madera ha abierto la puerta a nuevos materiales moldeables y fáciles de producir, creando nuevos compuestos a partir de sus polímeros.

La madera a lo largo del tiempo
Características y tipos
El fuego como fuente de luz y calor: Alimentos, fundiciones y dioses
Las herramientas y útiles: usos y derivados
El transporte: la rueda y la navegación
La construcción y el trabajo de la madera
El arte: la representación y la sonoridad del ser humano
La madera tecnológica, la celulosa y los nuevos compuestos derivados
El registro del tiempo: la dendrocronología
Piezas

Propiedades y características

Dureza

La madera presenta resistencia a la penetración de objetos (tornillos, clavos, etc.) y a ser rayada.

Densidad

La madera es menos densa que el agua por eso flota. 0,3 g/cm3 – 0,9 g/cm3.

Aislante

La madera seca es un buen aislante eléctrico y térmico. Es un buen combustible pero la capa exterior carbonizada ralentiza la propagación del fuego en el interior de la madera.

Conductor acústico

Buen transmisor sonoro. A 0°C el sonido viaja por el aire a una velocidad de 334 m/s y por la madera de roble a 3850 m/s.

Porosidad

La madera es capaz de absorber o desprender líquidos o gases.

Higroscopicidad

Es la capacidad de absorber y exhalar la humedad. Los cambios de humedad hinchan y contraen la madera provocando que se deforme. Pero es una característica adecuada como regulador de la humedad ambiental

Resistencia mecánica

Buena resistencia mecánica a la tracción, compresión y flexión.

Tenacidad

Capacidad para absorber la energía de un golpe. La madera posee una gran tenacidad por eso se utiliza en los mangos de las herramientas.

Hendibilidad

Alta al partirse en la dirección de sus fibras y vetas.

Color

Gran variedad cromática y de avetado.

Anisótropa

Distinto comportamiento físico según la dirección de la veta.

La madera a lo largo del tiempo
Prehistoria

5

La madera a lo largo del tiempo

Edad Antigua | Edad Media

4
5

La madera a lo largo del tiempo

Edad Media

4
5

La madera a lo largo del tiempo

Edad Moderna

4
5

La madera a lo largo del tiempo

Edad Contemporánea

8

Primeros fuegos

1.500.000 años

Las evidencias más antiguas de uso de fuego datan de hace un millón y medio de años en los yacimientos africanos de Chesowanja y Koobi Fora (ambos en Kenia). En el primero se encontraron más de 40 fragmentos de arcilla rubefactada asociada a la industria y fauna del Homo ergaster.

Lanzas y jabalinas

500.000 años

En Schöningen (Alemania) se han documentado ocho jabalinas de abeto y pino fabricadas por preneandertales hace 400.000 años. Estas tienen una longitud entre 182 y 250 cm y un diámetro que varía de los 3 a los 5 cm. Fueron utilizados para caza intensiva de mamíferos, ya que se han encontrado más de 16.000 huesos de animales, el 90% de equinos y el resto de ciervo rojo y bisonte europeo.

Arco de madera

El primer fragmento de arco de madera que fue hallado es el de Mannheim-Vogelstang (Alemania). Tiene una antigüedad de 17.600 años, 110 cm y en uno de sus extremos posee una muesca para encajar la cuerda tensada. Los restos más antiguos de flecha que se han encontrado son las flechas de Stellmoor, de 12.000 años de antigüedad, localizadas en una zona cercana a Hamburgo.

Palafitos

En las zonas pantanosas de los Alpes, hace 7.000 años, aparecieron los palafitos: viviendas realizadas sobre pilares o estacas de madera construidas en zonas de aguas tranquilas o pantanosas y en localidades costeras. La virtud de esta edificación es la de mantener el suelo de la vivienda o almacén alejado del agua y sus efectos. El mayor hito de esta expresión constructiva sería el origen de la ciudad de Venecia, sustentada gracias a un sistema de pilotes, grandes pilares de 3 m de largo y 0,5 m de diámetro que se clavaban en el cieno para crear grandes estructuras protourbanas.

Arado

6.000 años

El arado con reja de madera se descubrió en el Antiguo Egipto hace 6.000 años, aunque el origen de esta tecnología está en Oriente Medio, obra de las primeras civilizaciones que ocuparon los territorios entre el Tigris y el Éufrates. En un principio la fuerza de arrastre era ejercida por seres humanos. Los primeros ejemplos de utilización de animales datan del año 3.000 a.C. y se relacionan con bueyes.

Rueda

La rueda maciza de madera apareció en el 5.500 a.C. en Mesopotamia. Pese a que no existen aún evidencias arqueológicas, se cree que las primeras ruedas aparecieron 2.500 años antes en Sumeria, como una lenta evolución de la combinación del rodillo y el trineo. Fueron los egipcios quienes incorporaron posteriormente los radios, favoreciendo su aligeramiento.

Los fenicios

año 800 a.c.

Las grandes civilizaciones occidentales basaron su poder en la conquista del Mediterráneo y sus costas como eje vertebrador de sus imperios, utilizando embarcaciones construidas con madera. Desde antes del nacimiento de los grandes imperios de Grecia, Roma y el Califato Omeya, los fenicios dominaban el Mar Mediterráneo. Eran una potencia militar y comercial gracias al dominio naval que les permitió llegar más allá del Estrecho de Gibraltar. Entre los siglos IX y VIII a.C. fundaron en la Península Ibérica varias ciudades, entre las que destacan Gádir y Cartago Nova, actuales Cádiz y Cartagena.

Las barricas

El Imperio Romano asimiló los toneles de madera como envase principal tras la conquista
de la Galia, en el 58 a.C. Los galos usaban esta técnica para la conservación de cerveza y los fabricaban humedeciendo, doblando y calentando las tablas al fuego, la misma técnica que usaban para fabricación naval. Tras este descubrimiento, el Imperio Romano abandonó las ánforas y comenzó a utilizar barricas por sus ventajas para el transporte: no se rompían y se podían llevar rodando. Además, se percataron de que el vino almacenado en los toneles contaba con nuevos aromas procedentes del tostado de la madera, descubriendo una técnica de maduración del vino que ha llegado hasta nuestros días.

Los tablones romanos

El comercio de madera a larga distancia fue una constante en el Imperio Romano. La necesidad de obtener grandes tablones para la construcción o la fabricación de barcos y carros, motivó la búsqueda de bosques para obtener este tipo de elementos de más de 300 cm de largo. El estudio de un pórtico en los jardines de la vía Suavia de Roma ha demostrado que para su construcción se utilizaron tablones provenientes de bosques centroeuropeos situados a más de 1.700 km

Velas y madera

Los vikingos asimilaron la navegación de vela a finales del siglo VI, permitiéndoles realizar trayectos más largos y a mayor velocidad, pero no abandonaron el remo como fuerza propulsora. Se convirtieron en los mejores navegantes de la Alta Edad Media, adentrándose por el Mediterráneo hasta el Imperio Bizantino y en mar abierto hasta Islandia, Groenlandia y zonas cercanas a Canadá. La versatilidad de sus naves de madera les permitió remontar ríos para atacar ciudades de interior, como Sevilla en el 884 o París un año después. Los drakkar y los snekkar, naves largas y estrechas de poco peso y calado, les hicieron ser la potencia militar y comercial de la época.

El Islam y los artesonados

año 800

Con la consolidación de Al-Andalus como califato independiente (929 – 1010), el desarrollo científico y matemático permitió aplicar al arte la elaboración de complejas figuras poligonales. En el Islam, la geometría expresa la unidad y orden del universo como creación de Alá. Esta disciplina artística alcanza la perfección estilística aplicada a los artesonados de madera, cuya máxima expresión es la Alhambra de Granada.

La guerra y la madera

año 1000

Durante la plena Edad Media, del 1000 al 1250, se generalizaron las empalizadas de madera y las grandes armas de guerra como catapultas, mangoneles, trabuquetes y balistas típicas de las guerras feudales. Arquitectó­nicamente, se evolucionaron las cimbras romanas, las piezas de madera que sujetan arcos y bóvedas durante el proceso de construcción.

El agua y el aserrado

En el siglo XIII se comenzó a utilizar la energía hidráulica para el trabajo maderero. El uso de la sierra hidráulica fue impulsado por el desarrollo de las grandes construcciones como catedrales y palacios, que exigen un gran número de grúas, andamios y otros elementos auxiliares fabricados con madera. Ese aumento en la producción de herramientas exigió una mayor velocidad de aserrado que hasta el momento solo pudo ofrecer el agua. El primer plano de este tipo de sierra data de 1230, hecho por el arquitecto francés Villard de Honnecourt.

La madera y el lujo

año 1400

A finales de la Edad Media, la producción gremial, el comercio y las artes adquirieron un gran esplendor. La producción artística laica se fue haciendo tan importante como la religiosa, produciendo muebles de exquisita fábrica: camas, cofres y arcas, sillares, mesas, sillas, puertas y ventanas. El siglo XIV se distinguió por el lujo de estos elementos fabricados con madera, que viajaron por toda Europa, expandiendo e intercambiando estilos.

La carabela

La Escuela de Navegación portuguesa de Sagres fundada por Enrique el Navegante inventó la carabela en el siglo XV Este barco de madera perfeccionó el diseño de los drakkars vikingos y permitió atravesar los grandes océanos, alejándose de la costa. Su desarrollo permitió grandes viajes como los de Cristóbal Colón
a América.

El catolicismo y los retablos

año 1500

Los retablos de madera de las iglesias católicas fueron los elementos más relevantes en la decoración interior de templos y catedrales en el siglo XVI.Fue una expresión artística con mucha profusión en la Península Ibérica que dio el salto al otro lado del Océano Atlántico, a las colonias hispanas y portuguesas. Actualmente, no solo conservan su valor estético y espiritual, sino que son símbolos de identidad local.

El descubrimiento de Oceanía

año 1600

La madera asociada al desarrollo naval permitió a los holandeses llegar a Oceanía en 1606, lugar al que llamaron Australis Incognita, la tierra desconocida del sur. En 1770, el capitán inglés James Cook cartografió toda la costa este de Australia y la llamó Nueva Gales del Sur.

El Barroco y la talla en madera

Las características plásticas de la madera permitieron que la escultura barroca del siglo XVII, conocido como el Siglo de Oro español, alcanzase las más altas cotas de realismo conocidas hasta la fecha. Hubo dos grandes escuelas escultóricas que destacaron sobre las demás: la Castellana, con Gregorio Fernández (1576-1636) como máximo exponente y la Sevillana, con Juan Martínez Montañés (1568-1649) al frente.

La madera laminada

año 1800

A partir de la Revolución Industrial se experimenta con la madera para desarrollar nuevas cualidades y formas, como la madera laminada de Friedrich Otto Hetzer, germen de los tableros de contrachapado desde 1890. La empresa Otto Hetzer, fundada por sus tres hijos, dio a conocer los avances de este material en la Exposición Mundial de 1910 en Bruselas, donde recibió dos premios. El primer país donde triunfó este producto fue Suiza, donde en 1920 existían más de 200 edificios con viga o arcos de tipo Hetzer.

Celuloide y celulosa

año 1850

La invención del celuloide a partir de una solución alcohólica de nitrato de celulosa, el principal polímero que forma la madera, dio lugar a la primera sustancia moldeable antes de endurecer, hito humano único desde la primera fundición de los metales. Fue descubierto por John W. Hyatt en 1868 y su aplicación como película fotográfica fue obra de Hannibal W. Goodwin, quien en 1887 lo utilizó con ese propósito por primera vez. Dos años después, Eastman Kodak patentó la película con emulsión fotográfica, sobre la que se asentó su empresa hasta principios del siglo XXI.

Pinos resineros

año 1950

En 1961 España llegó a producir 55.000 toneladas de resina, lo que supuso el 10% de la producción mundial. Actualmente, la obtención de este material se está recuperando, sobre todo en Castilla y León, donde se han superado las 12.000 toneladas anuales. Se trata de un sector en alza porque las políticas europeas están potenciando la resina como producción sostenible frente a otras sustancias similares derivadas del petróleo.

El trabajo forestal

Las trituradoras forestales permiten desde el siglo XX el aprovechamiento del excedente de tala en los montes para la regeneración de los espacios naturales de manera sostenible, ayudando además en la prevención de incendios forestales. El trabajo forestal a nivel extractivo genera en España 111,8 millones de euros actualmente. La actividad primaria en el medio rural dedicada al sector silvícola y forestal ha aumentado un 11% con respecto al año anterior.

Andamios de bambú

En el continente asiático, hoy día siguen utilizándose andamios de bambú, llamados taap pang, para grandes obras por su flexibilidad, precio y rapidez en el montaje. Solo en Hong Kong hay más de 1.700 andamios de bambú, formados por más de 5 millones de esquejes que alcanzan los 8 metros. Se siguen utilizando porque son flexibles, permiten crear piezas de cualquier tamaño y montarse muy rápidamente: con obreros experimentados, se pueden colocar 20.000 metros cuadrados de andamio en un día.

El pellet

año 2000

Tras el Crac del 29, Estados Unidos se sumió en una profunda recesión económica. Fue entonces cuando una serrería de pino de Idaho inventó una forma de reciclaje de serrín y restos de poda en bloques de serrín prensado, del tamaño de un tronco mediano, de 20 a 30 cm de diámetro. Salió al mercado con el nombre de Presto-log. Con el tiempo, se fueron creando formatos de biocombustible más pequeños, siendo el más conocido el pellet, uno de los combustibles caloríficos domésticos más utilizados por su sostenibilidad y bajo coste. En 2018, en España se consumieron 600.000 toneladas de pellets.

Madera y otros materiales

En el siglo XXI, la madera se combina con otros materiales para generar composites -resinas y materiales sintéticos más ecológicos- que permiten su utilización en impresoras 3D. Por primera vez en su historia, la madera pasa de ser esculpida y cortada a extrusionada y modelada en filamentos de madera.

1
La madera: Composición,
características y tipos

La madera es un material natural que aparece en forma de troncos y ramas de árboles, por lo que es de fácil su obtención y manipulación. Puede ser trabajado tal cual, eliminando material para darle la forma buscada o transformándolo en derivados mediante la utilización de sus resinas, cortezas y otros elementos. Es un compuesto higroscópico que reacciona a las variaciones de humedad de su entorno, alterando su volumen.

La madera está hecha de fibras de celulosa, el biopolímero natural más abundante de la corteza terrestre. Gracias a su utilización, los humanos hemos creado numerosos derivados, así como de las otras sustancias que la acompañan, como almidones, aceites y resinas y sus derivados, como el aguarrás o la trementina.

Por su dureza y su densidad, es buen aislante térmico y eléctrico, así como un gran conductor acústico.

Existen tantos tipos de madera como especies de árboles (más de 60.000), no todas aprovechables, se clasifican habitualmente en blandas o tempranas y duras, también llamadas tardías.

 

  • Las blandas proceden de árboles de crecimiento rápido, perennes y coníferas, como olmos, álamos, pinos, cipreses y cedros. Son más fáciles de trabajar.
  • Las duras son aún más resistentes y costosas, puesto que se obtienen de árboles de crecimiento más lento y son más difíciles de trabajar por su exterior irregular. Entre ellas destacan las maderas de caoba, roble, nogal, olivo, cerezo o fresno.

60.000

Especies de árboles, cada una con un tipo de madera diferente.

2
El fuego como fuente de luz y calor.

Alimentos, fundiciones y dioses

La combustión de la madera – a partir de los 300º- produce fuego con calor y luz. Es uno de los elementos más utilizados por los humanos desde hace más de un millón de años. Gracias a la madera, los seres humanos superamos los ritmos naturales de luz y temperatura: fuimos capaces de crear luz en la noche, calor en el frío y modificar los alimentos, para mejorar su consumo o su conservación. También se utilizó como protección contra los depredadores. No ha perdurado ningún grupo humano en la historia que desconociera el uso del fuego y cómo producirlo.

La cocción de la carne elevando su temperatura en el fuego, facilita su ingesta y la absorción de proteínas, facilitando su digestión. Además, elimina parásitos y bacterias. El ahumado es una técnica de conservación de los alimentos cárnicos. Para ello se debe exponer la carne a una combustión sin llama utilizando madera poco resinosas. Un producto ahumado puede perdurar hasta dos meses de media, aunque hay alimentos como la langosta que llegan hasta el año de conservación.

El fuego es uno de los cuatro elementos que, según la tradición occidental, forman los principios básicos de la materia junto con el agua, la tierra y el aire. Esta creencia presocrática perduró hasta el Renacimiento y se la considera predecesora de los estados de la materia y el concepto de combustión. En la cultura china, esta idea perdura en su medicina tradicional, con el agua, la tierra, el fuego, el metal y la madera como elementos básicos.

Según la tradición greco romana, el dios Hefesto (Vulcano en latín) era el dios del fuego, que había sido retirado por Zeus (Júpiter) a los humanos como castigo y recuperado por Prometeo, el titán protector de la civilización humana. En Roma, existía el flamen, el sacerdote romano encargado de encender el fuego sagrado del altar y uno de los de mayor prestigio.

Gracias al fuego, el ser humano ha podido fundir metales, crear cerámica y vidrio y elaborar los plásticos.

    Huehuetéotl

    Qué significa “dios-viejo” es el nombre con el que se conoce genéricamente a la divinidad del fuego en las antiguas culturas mesoamericanas. Se le representaba como un anciano arrugado, barbado, desdentado, encorvado y con un enorme brasero sobre sus espaldas.

    300°

    Temperatura a partir de la cual la combustión de la madera produce fuego con calor y luz visibles.

    3
    Las herramientas y útiles:
    usos y derivados

    La madera forma parte de la gran mayoría de las herramientas que ha usado la humanidad a lo largo de su historia. Nuestra relación con este material surge hace más de dos millones de años cuando los primeros Homo se ayudaron de ramas para sus actividades vitales.

    Los primeros útiles de madera tuvieron el objetivo de conseguir mayor fuerza, alcanzar mayores distancias para la caza o acceder a lugares limitados por el mismo físico humano. Los avances tecnológicos nos permitieron obtener mejores capacidades, adaptándonos al entorno con estrategias de otros animales.

    La sedentarización humana produjo cambios en las necesidades. Las nuevas actividades requirieron nuevas herramientas y la madera y los vegetales fueron clave en este desarrollo tecnológico. El tejido sistemático de nuevos materiales como el esparto o el miembre dio origen a la cestería y motivó la aparición de los primeros tejidos y teleares.

    El estudio y la comprensión de las características de cada tipo de madera aportaron a nuestros antepasados una visión óptima de su funcionalidad. En el terreno de la viticultura hay una evidente muestra de ello. En la producción del vino, desde sus orígenes, la madera está presente en las herramientas del proceso productivo como el prensado. Para su conservación, se eligieron barricas de roble, que aportan una maduración en la que el contenido se beneficia del continente, por sus propiedades organolépticas, perceptibles por los sentidos.

    vino

    Las barricas de roble aportan una maduración en la que el contenido se beneficia del continente, por sus propiedades organolépticas, perceptibles por los sentidos.

    tenacidad

    Es la capacidad que tiene un cuerpo para absolver la energía de un golpe. La madera presenta una gran tenacidad por este motivo desde la Prehistoria la mayoría de los mangos de las herramientas se han fabricado en madera.

    4
    El transporte:
    La rueda y la navegación

    El surgimiento de los medios de transporte está íntimamente ligado a la madera. La invención de la rueda hace más de 5.500 años supuso un gran avance para los movimientos de personas y mercancías, favoreciendo el comercio, las migraciones y las conquistas de otros territorios.

    En el mismo tiempo, los egipcios comenzaron a construir barcos, inicialmente de papiro que se fueron sustituyendo por otros de cedro o de tamarisco. El gran dominador del Mar Mediterráneo fue el pueblo fenicio, que alrededor del año 1000 a.C. eran la mayor potencia comercial y bélica. Utilizaban grandes barcos veleros con filas laterales de remeros.

    Durante la Edad Media se crearon importantes rutas comerciales entre occidente y oriente, como la Ruta de la Seda, que combinaba transporte terrestre en Asia y marítimo en el Mediterráneo.

    La carabela surgió como sustituto a las galeras que hasta entonces usaban las armadas europeas. Se trataba de barcos pequeños, rápidos y maniobrables, pero con gran fuerza, lo que les hacía muy adecuados para la navegación de altura. Llevaban tres mástiles de velas y un timón. La vela latina, móvil, permitía navegar en cualquier dirección.

    Esta circunstancia unida al auge del Imperio Otomano, que bloqueó el acceso occidental al sur y el este del Mediterráneo, hizo que los estados europeos buscaran nuevas rutas de acceso a oriente, circunvalando África o buscando una nueva ruta hacia el oeste.

    La última opción fue la que hizo posible el descubrimiento de un nuevo continente, desconocido hasta entonces por occidente: América.

    Aunque se había descubierto y rodeado completamente tiempo atrás, no fue hasta 1911 cuando el ser humano pisó la Antártida, el único continente que quedaba por explorar en los mares del planeta.

    Rodillo
    Trineo

    Carro

    Durante la prehistoria el sistema de rodillo se utilizó para acarrear grandes piedras. El trineo de madera se utiliza aún hoy en día como elemento de transporte en algunas regiones del Ártico. La combinación de ambos sistemas dio como resultado el carro.

    5
    La construcción
    y el trabajo de la madera

    Durante la revolución neolítica los grupos humanos comenzaron a construir diferentes edificaciones de madera asociadas al almacenaje, estabulación del ganado o a la propia vivienda.

    Las primeras edificaciones estaban hechas de madera en rollo: troncos apeados y desarmados separados de la copa y clavados en el suelo. Los avances tecnológicos y de otros materiales hicieron que variase el empleo de la madera en la construcción. Durante la Antigüedad Clásica y la Edad Media la madera se utilizó para fabricar andamios, vigas, adintelamientos y otros soportes constructivos. También fue un material clave en la fabricaicón de las primera poleas que sirvieron para levantar otros materiales pesados. Las primeras poleas, utilizadas para levantar los materiales pesados, también eran de madera.

    La madera fue un material básico en la colonización del oeste americano en el s. XIX. Hasta la progresiva llegada del ferrocarril, las carretas fueron el medio de transporte más utilizado. De la misma manera, el asentamiento exigió un rápido sistema constructivo que no requiriese conocimientos técnicos y se planteó una nueva técnica de construcción para la colonización más rápida posible: el balloon frame. Este sistema consistió en la sustitución de vigas por listones más finos y numerosos, clavados entre sí. El éxito fue tan rotundo que, con este sistema y su evolución, el platform frame, con paneles grandes en vez de tablas, se siguen construyendo las viviendas en toda América del Norte.

    Desde el mundo clásico la carpintería ha sido un oficio que ha condensado todo el conocimiento sobre el trabajo de la madera, utilizado tanto en la construcción como en la creación de pisos y mobiliario de su interior.

    Notre Dame. Esqueleto de madera

    El incendio que asoló en 2019 la catedral parisina hizo desaparecer su cubierta de madera del siglo XIII. Se calcula que para su construcción se emplearon 13.000 robles de unos 10 metros de largo que podían tener entre 300 y 400 años cada uno.

    6
    El arte, la representación
    y la sonoridad del ser humano

    La madera ha estado presente en el arte desde sus primeras manifestaciones: en forma de carbón para la pintura, de forma natural para las tallas o como elemento percutor en los primeros instrumentos musicales como los litófonos.

    La expresión humana a través de la música fue evolucionando y la madera fue combinándose con otros materiales, dando lugar a la familia de los instrumentos de cuerda. Estos llegaron a Europa desde oriente, como el rebab, un predecesor del violín moderno que introdujeron los musulmanes en la Península Ibérica durante el siglo VIII. Encontramos un sucesor castellano en la vihuela, muy extendida durante la Edad Media. La cumbre de los instrumentos de cuerda llegaría en el siglo XIX con la profusión de las obras para violín de maestros como Mendelssohn, Tchaikovsky o Beethoven.

    Aunque en la escultura no alcanzó el reconocimiento de otros materiales como el mármol, es uno de los recursos más utilizados, desde los sarcófagos egipcios a los tótems de los nativos norteamericanos. En Europa, la talla de madera está vinculada en su mayoría a la temática sacra. La escultura barroca hispana es considerada una de las más realistas por las características propias del material, que permitían mejores tallas y policromías.

    En dibujo y pintura, podemos observar la revolución que supuso para este arte el análisis de la escultura africana en madera que reutilizó Picasso en las obras que preludian el cubismo.

    En otras artes como la fotografía, artistas como Eadweard Muybridge investigaron para fotografiar secuencias de movimientos y restituir una imagen perceptiva del movimiento partir de ellas. En 1889 Eastman Kodak patentó la película de celuloide recubierta de emulsión fotográfica que sustituyó a la placa de cristal y alteró el mundo de la imagen. El celuloide o nitrato de celulosa es un material flexible, enrollable y resistente que permitió ser cargado en las cámaras y los proyectores, suponiendo el inicio de la fotografía instantánea y de la cinematografía.

    madera
    y cubismo

    La talla en madera de máscaras y esculturas africanas influyó en el siglo XX en Picasso y el nacimiento del cubismo como se puede ver en el cuadro de las “Señoritas de Avignon”.

    7
    La madera tecnológica, la celulosa
    y los nuevos compuestos derivados

    Con la llegada de la industrialización, aumentó la demanda de madera para sus diferentes usos. La especialización laboral, la simplificación y estandarización de los procesos de fabricación requirieron en muchos casos de piezas prefabricadas de madera. De esta forma los elementos de madera comenzaron a estar muy presentes en las primeras líneas de montaje a principios del siglo XX.

    Por su parte la química maderera permitió, mediante la combinación de la madera con diferentes ácidos y óxidos, la obtención de fibras derivadas de los polímeros de celulosa. Una de las más conocidas fue el rayón nitrocelulosa, imitación de la seda natural, de ahí su sobrenombre de seda artificial o seda Chardonnet, en honor a su inventor, Hilarie Chardonnet que la desarrolló en 1889. En 1908, Jacques E. Brandenberger inventó el celofán, en su búsqueda de un material para tejidos que repeliese la humedad. Su nombre viene de CELulOsa diáFANa, por ser transparente, fino y flexible. Es también resistente a la tracción e impermeable. Su proceso de obtención es muy similar al del papel, mediante una cocción a presión hasta crear una pasta sin lignina. Si bien no se utilizó para su uso inicial, se hizo muy popular para el empaquetado de alimentos.

    El desarrollo químico permitió crear otros formatos de material a partir de las virutas y fibras sobrantes. A lo largo del siglo XX, aparecieron nuevos formatos de madera en el mercado, que permitían una mayor y más barata producción en cadena.

    Las tecnologías de fabricación actuales han abierto la puerta a la madera como elemento textil, como tejido y superando el uso tradicional en calzado y complementos.

    En el siglo XXI, la madera se está combinando con otros materiales como el PLA -ácido poliláctico o poliácido láctico- de manera que se generan composites que permiten la fabricación por extrusión 3D, con la posibilidad de generar usos inmediatos al alcance de las personas a través de las impresoras 3D.

    nuevos formatos de madera

    contrachapado

    El tablero contrachapado: encolado de chapas de madera laminada, impulsado por las industrias aeronáutica y automovilística para revestimientos interiores.

    dm

    El DM o tablero de fibras de densidad media. Obtenido aplicando presión y calor a fibras de madera con adhesivo. Homogéneo y uniforme, son adecuados para la fabricación de muebles por su facilidad para ser trabajados.

    contralaminado

    El tablero contralaminado, que alterna placas de madera con diferentes disposiciones de sus fibras para dotarlo de mayor resistencia a la torsión.

    8
    La dendrocronología y el registro del tiempo

    Aunque desde la Antigüedad se conoce la formación de anillos anuales en la madera, se considera que fue el astrónomo Andrew Ellicott Douglass quien estableció los principios de la dendrocronología en 1914. La dendrocronología (del griego dendron árbol y cronos tiempo) es la disciplina que estudia los anillos de crecimiento de la madera para establecer cronologías de referencia de una determinada especie en una zona climática concreta. El desarrollo dentro de la botánica fue tan relevante que en 1937 creó el primer laboratorio de investigación en dendrocronología. A partir de árboles vivos y la superposición de secuencias procedentes de maderas de mayor antigüedad, en algunas zonas de Europa se han completado registros de más de 8.000 años. Gracias a la dendrocronología se ha logrado reconocer con enorme precisión -de hasta un año en las zonas donde hay suficientes registros botánicos- el clima en el planeta tierra.
    Lo anillos de un árbol no dejan de crecer durante toda la vida del mismo, por lo tanto contabilizando el número de anillos se puede llegar a conocer la edad de cada árbol. El tamaño, la forma y el color de los anillos depende de diferentes factores. o agentes que nos dan información sobre el pasado relativa a:

    Agentes biológicos

    Plagas

    Factores climáticos

    Sequías, bajas temperaturas, etc.

    Factores físicos

    Incendios

    Factores humanos

    Selvicultura

    Caducifolio o perenne

    Dependiendo si el árbol es de hoja caduca o perenne se pueden observar un anillo o dos por cada año. Los arboles caducifolios tienen un único periodo de crecimiento en el año, al llegar el invierno pierden sus hojas y este crecimiento se detiene, por lo cual solo poseen un anillo por año.

    Piezas

    Lanzas de Schöningen

    400.000 años

    Museo Arqueológico de Schöningen (Alemania)

    Estandarte de Ur

    4.500 años

    Necrópolis de la antigua ciudad de Ur (Irak)
    Museo Británico de Londres (Gran Bretaña)

    Artesonado de la Torre de las Damas

    1320

    Palacio del Partal de La Alhambra de Granada
    Pergamonmuseum de Berlín (Alemania)

    Reproducción Nao Santa María

    1492

    Juan de la Cosa
    Muelle de las Carabelas de La Rábida de Palos de la Frontera (España)

    Silla zigzag

    1934

    Gerrit Rietveld
    Colección Cassina (Italia)

    Bibliografía

    Arriaga, F. (2001). “Estructuras de madera”. Tectónica: monografías de arquitectura, tecnología y construcción, 13, pp 4-26.

    Cavanagh, T. (1997). Balloon houses: The original aspects of conventional wood-frame construction re-examined. Journal of Architectural Education, 51 (1), pp 5-15.

    Di Nardo, C. (1998). Curso básico de carpintería. De Vecchi. Pp. 192.

    Grohe, G. (1996). “El futuro de la construcción con madera”. Tectónica: monografías de arquitectura, tecnología y construcción, 13, pp 4-26.

    Guitérrez Merino, E. (2009). “La dendrocronología: métodos y aplicaciones”. X. Nieto y M.A. Cau (Eds.) Arqueologia nàutica mediterrània. Monografies del CASC. Generalitat de Catalunya, pp 309-322.

    Hurtado Valdez, P. (2008). Auguste Choisy: El dibujo de las cimbras románicas y góticas. Universidad Politécnica de Madrid.15 p.

    Jackson, A., & Day, D. (1993). Manual completo de la madera, la carpintería y la ebanistería. Ediciones del Prado. Pp. 320.

    Piqué, R. (2020). Armas y herramientas de madera usos tecnológicos de las plantas. Cuadernos de Atapuerca. Diario de los Yacimientos de la Sierra de Atapuerca, 13. Burgos, 32 p.

    Peterson, F. W. (2000). “Anglo-American wooden frame farmhouses in the Midwest, 1830-1900: Origins of balloon frame construction”. Perspectives in vernacular architecture, 8, pp 3–16.

    Soto, J. L. C. (2006). “Barcos para la guerra. Soporte de la Monarquía Hispánica”. Cuadernos de Historia Moderna, 5, pp 15–53.

    Recursos audiovisuales

    Materiales. Una historia sobre la evolución humana y los avances tecnológicos

    Madera
    UBU

    Vivir con madera

    La aventura del saber
    RTVE- UPM

    Tocar madera

    Escala humana
    TVE